¿Cómo afectan las crisis a la creación de startups?

En este post veremos cómo afectan los tiempos de crisis en las startups. Y si hay algo que podemos afirmar es que de las crisis nacen grandes oportunidades.

Como ejemplo, tenemos la crisis de 2009, donde nacieron compañías como Airbnb, Uber, o Privalia en el mercado español. Además la crisis financiera que empezó en 2008, cambió el sector de los servicios financieros con el nacimiento de las fintech, el auge de las empresas de pagos digitales y la aparición de nuevos bancos sin sucursales y con costes más bajos.

Otro ejemplo y más reciente es la pandemia del coronavirus, que nos trajo un progreso “a veces forzado” de la digitalización de determinados sectores, permitiendo hacer eventos, consultas médicas o trámites de instituciones públicas mediante videollamadas o mediante procesos online. En definitiva, aquello que esperábamos que ocurriera en 5 años, se aceleró y se implementó en apenas 2 meses. 

Pero esto no solo ocurre ahora con las startups: Microsoft, EA o Burger King nacieron en mitad de otras crisis económicas. 

Lo que nos ha enseñado el tiempo y los cambios cíclicos económicos, es que las crisis pueden ser un buen momento para las startups, y en el post de hoy veremos por qué.

Durante las crisis se dan dos fenómenos que aplican a las Startups:

Normalmente en tiempos de crisis, acostumbran a nacer muy buenas startups

Startups más resilientes, con el foco puesto en ganar clientes y escalar rápido, sin quemar caja, centradas en el negocio. 

¿Y por qué las crisis son un buen momento?

Warren Buffet tiene una cita que dice: “cuando baja la marea se puede ver quién estaba nadando desnudo”. Y lo que viene a decir es que en épocas de crisis puede verse con mayor nitidez lo que no funciona, se ven los modelos de negocio que empiezan a fallar y las empresas que no han sido bien gestionadas, bien sea por no tener el foco puesto en lo importante, mucha deuda, o que estén demasiado cómodas desde hace demasiado tiempo.

Y en este momento es cuando pueden surgir compañías que hagan una mayor competencia: con un producto mejorado, una solución innovadora o la capacidad de ser ágiles. Una cuestión que suele ser la debilidad para empresas tradicionales o ya establecidas, puede que éstas no sean lo suficientemente rápidas, y que no estén protegidas o preparadas para tiempos de crisis. 

En estos tiempos es cuando nacen startups disruptivas capaces de solucionar nuevos problemas, startups que mejoran procesos o productos que no quedaban satisfechos con empresas ya establecidas desde hace tiempo. Las startups, al ser más innovadoras y ágiles es fácil que roben cuota de mercado a la empresa tradicional y finalmente les ganen la batalla. 

Massimo Cermelli, profesor de Economía y Dirección de Empresas Deusto, señala que “en épocas de crisis, el número de creación de empresas innovadoras es mayor, ya que son aceleradoras de ideas de negocios”. Y se abre la puerta a que puedan surgir nuevas ideas disruptivas.

Las crisis son feroces y son capaces de hacer desaparecer del mercado a un número importante de empresas que no son lo suficientemente competitivas. Por contra, también son los tiempos idóneos para lanzar empresas y que tengan la oportunidad de posicionarse. 

Es cuando surgen más (o pivotan hacia) las llamadas Startup Camello

Se dice de las startups que han nacido en tiempos de crisis y han resistido la travesía del desierto “sin agua”. Aquellas que son capaces de adaptarse a tiempos donde es muy complicado conseguir financiación.

También, muchas de las compañías existentes, que consiguen pivotar hacia un sistema más competitivo, adaptándose al momento que les ha tocado vivir: reduciendo costes, estirando runway, cambiando prioridades y siendo, en definitiva, más resistentes. Y menos dependientes a las rondas, a la necesidad de conseguir capital. Pasamos de ver como las startups persiguen ser el tan ansiado unicornio, a querer ser camello.

Por tanto, las crisis las superan las empresas competitivas, resistentes y las que tienen capacidad de adaptación. 

En resúmen: 

• Los tiempos de crisis son un buen momento para buscar oportunidades, innovar, mejorar servicios y lanzar startups disruptivas y competitivas. 

• Las startups ya existentes tienen la oportunidad de pivotar o de hacer reajustes, de centrarse en optimizar su negocio, y de ser más sostenibles.

• De cara a los inversores es un buen momento pues veremos nacer nuevas startups mucho más resilientes y creativas. También es un momento donde las valoraciones sufren un reajuste, por lo que en los próximos meses, encontremos buenas oportunidades de inversión.

No te pierdas el Dozen Talks donde abordamos el tema de “cómo invertir en tiempos de incertidumbre y volatilidad” .

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